El arzobispo emérito de México, Norberto Rivera Carrera, se unió este miércoles a los cardenales del mundo que acompañaron el traslado de los restos del papa Francisco hacia la Basílica de San Pedro, en el inicio de las ceremonias de exequias del primer pontífice latinoamericano.
Rivera, de 82 años, caminó junto a otros cardenales en la procesión solemne que escoltó el ataúd de Jorge Mario Bergoglio desde la capilla de la residencia de Santa Marta hasta la plaza vaticana, en un rito transmitido por el Centro Televisivo del Vaticano.
Aunque por su edad Rivera ya no tiene derecho a voto en el próximo cónclave, sí participa con voz en las reuniones del Colegio Cardenalicio, según confirmó el Episcopado Mexicano a través de sus redes sociales.
“El Cardenal Norberto Rivera Carrera, arzobispo Emérito de nuestra Arquidiócesis, acudió a la Basílica de San Pedro para unirse en oración con el resto de cardenales del mundo por el eterno descanso del papa Francisco”, informó la Arquidiócesis en un mensaje difundido junto a una imagen del prelado durante la ceremonia.